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Destinado a aplicaciones higiénicas en industrias de las ciencias de la vida, farmacéutica y alimentaria, el sensor de la conductividad Memosens CLS82D, de Endress+Hauser, es un sensor digital higiénico para aplicaciones con unos valores de conductividad muy variables y funciona de un modo fiable, seguro y rápido.
El sensor de la conductividad Memosens CLS82D se encuentra disponible con una amplia gama de conexiones a proceso higiénicas
Con tecnología digital Memosens, el equipo CLS82D combina la máxima integridad de proceso y datos con un fácil manejo. Es resistente a la corrosión y la humedad, permite la calibración con calidad de laboratorio y facilita el mantenimiento predictivo.
Entre las ventajas que aporta se pueden destacar las siguientes: rangos de medición amplios; diseño higiénico certificado por EHEDG y 3-A; seguridad absoluta del lazo gracias a Memosens y a una monitorización única de la conexión del electrodo; apto para esterilización y autoclave: certificado de calidad que especifica la constante de cada célula de medición; registro de los datos específicos del sensor para una fácil trazabilidad y mantenimiento predictivo; estrategia práctica de mantenimiento mediante Memobase Plus para una sencilla calibración y gestión de los sensores
Su ámbito de aplicación cubre la separaciones de fases, los procesos de fabricación, la fermentaciones, o el aclarado final en aplicaciones farmacéuticas
Numerosos certificados, diversas conexiones a proceso y un diseño pequeño y compacto garantizan un ajuste perfecto para el proceso. Además, on sus certificados internacionales de protección contra explosiones, como ATEX, FM, CSA y NEPSI, el sensor digital es apto para uso en zonas explosivas.
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