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Bajo el lema “Explorar para Decidir”, el secretario general de FITEQA-CC.OO, José Luis Montesinos; el secretario general de FITAG-UGT, Antonio Deusa, y el director general de FEIQUE, Juan Antonio Labat, firmaron el pasado 31 de enero una posición conjunta sobre Gas Natural No Convencional, en el marco del Observatorio del Convenio General de la Industria Química.
De izquierda a derecha, el Director General de FEIQUE, Juan Antonio Labat; el secretario general de FITAG-UGT, Antonio Deusa, y el secretario general de FITEQA-CC.OO, José Luis Montesinos
La firma de esta Declaración se desarrolló durante la jornada “Gas Natural No Convencional, ¿Revolución en la Química?”, moderada por el Decano del Colegio Oficial de Ingenieros de Minas de Centro de España, Ángel Cámara. En la misma intervinieron Juan García Portero, geólogo del Colegio Oficial de Geólogos, quien explicó la técnica de la fracturación hidráulica; Mariano Marzo, catedrático de Estratigrafía de la Universidad de Barcelona, quien analizó la situación de España respecto al Gas No Convencional y nuestro actual sistema energético, y Juan Carlos Muñoz-Conde, portavoz de Shale Gas-España, quien evaluó el eventual impacto que el desarrollo de esta nueva fuente de energía tendría sobre el empleo y la competitividad en nuestro país.
Como se apunta en la declaración, la disponibilidad de energía a un precio competitivo es indispensable tanto para el desarrollo de la sociedad, la economía y la industria en general, como del sector químico en particular. En concreto, para la industria química el gas natural no solo es una fuente de energía, sino esencialmente una de sus principales materias primas, con la que desarrolla múltiples productos que se sitúan en el inicio de la cadena de valor de la práctica totalidad de los sectores industriales.
Sin embargo, el elevado grado de dependencia energética de España ha permanecido desafortunadamente estable durante las tres últimas décadas en el entorno del 80%. Y, según estimaciones realizadas por la Comisión Europea, nuestro país no verá tampoco una reducción significativa de este ratio en las próximas dos décadas, añade.
“Cualquier debate sobre competitividad, desarrollo económico o política industrial que pretenda abordarse en España, y más específicamente en la industria química, no puede soslayar, en ningún caso, las posibilidades de autoabastecimiento tanto de gas natural convencional como del no convencional que puedan existir en nuestro país”, declaran los firmantes en esta posición conjunta. “En la economía global, condenar a la industria española a competir con un precio del gas tres veces al de Estados Unidos, es condenar su futuro”, reafirma la Declaración.
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