El uso de materiales plásticos se ha extendido notablemente en las últimas décadas, especialmente en la industria química, donde se usan productos corrosivos. La favorable relación resistencia a la corrosión/precio/vida útil de los plásticos frente a otros materiales ha hecho que su uso sea cada día más frecuente, no solo en la industria química, sino en otros campos como el tratamiento de aguas.
Thermal Energy International, en colaboración con Tecniq 2013, como distribuidores para la península ibérica del fabricante internacional de sistemas para reducir consumos de energía, ha firmado un contrato con una empresa fabricante de productos químicos de Barcelona para la instalación del sistema Flu-Ace para recuperar energía de dos calderas de aceite térmico. La instalación se realizará en la salida de los humos de las calderas mencionadas a principios de 2023. La vida media de estos sistemas es de 25-30 años, y el retorno de la inversión estará alrededor de 1 año.
En las últimas décadas se han descubierto sustancias en el medioambiente que, si bien han estado presentes durante mucho tiempo, hasta ahora habían pasado desapercibidas, entre otras razones debido a la falta de técnicas adecuadas para su detección. En este grupo de compuestos químicos se incluyen los conocidos como contaminantes emergentes, como así también los compuestos persistentes. Entre estas sustancias se encuentran las PFAS (sustancias per- y polifluoroalquiladas).
Abengoa ha reafirmado en este 2022 su potente presencia en el sector del tratamiento de aguas con una apuesta decidida por el mercado de Oriente Medio, en donde cuenta con un portafolio muy extenso: en Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Omán, pero también con proyectos en el Magreb.
Cepsa invertirá más de 3,000 millones de euros para establecer el Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, que situará a Andalucía como el mayor hub de Europa en esta tecnología. Este proyecto, enmarcado en el plan estratégico 2030 de la compañía, convertirá a esta región y a España en una potencia energética.
El Ministerio de Transportes ha limitado los supuestos en los que los conductores pueden participar en las tareas de carga y descarga, añadiendo una Disposición Adicional 13ª a la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres LOTT (RD-Ley 3/2022 y RD-Ley 14/2022).